lunes, 12 de julio de 2010

RECONOCIMIENTO A DON IQBAL RIZA

Durante el desarrollo de la Sesión Plenaria del día 8 de julio de 2010, la Asamblea Legislativa le entrega de la Distinción Honorífica al señor Syed Iqbal Riza, como "Noble Amigo de El Salvador".
El diputado Mario Marroquín en representación del Grupo Parlamentario de ARENA dio las siguientes palabras:

· Nos sentimos sumamente complacidos y honrados al contar esta mañana entre nosotros, con la persona de don Iqbal Riza para rendirle un homenaje en nombre del pueblo salvadoreño a quien representamos, por sus indiscutibles meritos que a favor de la causa de la Paz labor que ha realizado en las diferentes participaciones que le ha encomendado la Organización de Naciones Unidas en diferentes países del mundo.

· Don Iqbal Riza llegó a El Salvador, con motivo del proceso de paz en el año de 1991 para presidir la misión de ONUSAL, que desarrolló el proyecto de supervisión y cumplimiento del primer Acuerdo sobre Derechos Humanos, resultante de los acuerdos de Chapultepec.

· Para fortuna de los salvadoreños contar con una personalidad del calibre del Embajador Iqbal Riza significó, en momentos tan difíciles y complejos; ya que, aun la guerra se desarrollaba a plenitud en El Salvador por esos días, un gran acierto. Una temática de gran envergadura y sensibilidad como los Derechos Humanos requería de un cuidadoso manejo y abordamiento, para generar confianza y credibilidad entre los diferentes actores que intervenían en el conflicto armado y la sociedad salvadoreña.

· El Embajador Iqbal Riza supo, en base a su experiencia y dominio del escenario diplomático, sacar adelante y exitosamente la tarea que le fue encomendada, logrando edificar a partir del inicio de su misión un proceso estable y consistente en la promoción y defensa de los Derechos Humanos. Jamás olvidaremos sus grandes atributos de don de gente y afable conciliador. Era justamente lo que se necesitaba en esos momentos, en una sociedad polarizada y confrontada a lo largo de 12 años. Lo que había que sembrar era la esperanza de superar el tan horrible holocausto de la guerra y para ello se requería la palabra sincera y ponderada de un representante de Naciones Unidas, que volviera realidad las expectativas de paz y de reconciliación en todos los salvadoreños.

· Muchas anécdotas podríamos comentar del trabajo arduo y fatigoso que le toco desempeñar al Embajador Riza; incluso, la no muy favorable impresión que le provocaba la presencia de un organismo internacional a los salvadoreños en nuestro suelo, ya que para aquellos días la atmósfera que se respiraba en nuestro territorio era sumamente tensa e inhóspita y solamente la

· sensatez, paciencia y tolerancia que poseía tan distinguido diplomático paquistaní, hizo posible que los salvadoreños fuéramos cambiando nuestra actitud y aceptando que la presencia de Naciones Unidas iba más allá de lo que pudo ser la intromisión de un organismo internacional en los asuntos de los salvadoreños, más bien era un organismo garante de la nueva etapa de paz cuya construcción estábamos iniciando.

· El dicho de los salvadoreños en relación al contenido del párrafo anterior, se traducía en la siguiente frase: “ONU-SAL”, cuando realmente la misión se denominaba: ONUSAL, cosas que ahora las recordamos con cierto ánimo de jocosidad, ya que el momento así nos lo permite.

· Por lo tanto, este día es de mucha alegría para todos los salvadoreños que vivimos aquella tan difícil etapa para nuestro país, las pasadas, presentes y nuevas generaciones construimos y vivimos un nuevo El Salvador producto de todas las voluntades, tanto nacionales como internacionales como es el caso del Embajador Riza, que nos dimos a la tarea de ponerle fin a una guerra fratricida y edificar un nuevo país en el tránsito de la guerra a la paz y de la paz a la democracia.

· Gracias Embajador Riza por habernos permitido compartir con usted tan noble causa. Todos los salvadoreños se lo agradecemos y compartimos con usted este sincero y significativo homenaje que la Asamblea Legislativa de El Salvador le confiere en este día.

martes, 6 de julio de 2010

ARENA EN LA ASAMBLEA LEGISLATIVA (PRIMERA ENTREGA)



ARENA nació a la vida política de nuestro país el 30 de septiembre de 1981. Desde 1982 a la fecha, hemos contado con una representación legislativa importante, pudiendo identificar tres períodos:
El primero, que va desde el 1 de mayo de 1982 hasta el 31 de mayo de 1989;
El segundo, va desde el 1 de junio de 1989 hasta el 31 de mayo del 2009 y
El tercero, va desde el 1 de junio de 2009 en adelante.

Recordemos que unos meses después del golpe de Estado del 15 de octubre de 1979, que rompió el marco jurídico y la institucionalidad del país, se conformó el “Gobierno de Unidad Nacional” que acordó restablecer el estado de derecho e ir a elecciones de una Asamblea Constituyente que redactaría la nueva Constitución de la República, un histórico 28 de marzo de 1982, donde fuimos a votar bajo las balas y las amenazas del FMLN, que no nos atemorizaron y la votación fue masiva. ARENA obtuvo 18 diputados; es decir, que nacimos como un partido político de oposición. El FMLN no participó en el evento electoral, a pesar de que existían las condiciones y estar abiertos los espacios políticos.

Durante los ochentas y principios de los noventas se establece una guerra a muerte entre las fuerzas antagónicas, un autoritarismo militar vs un totalitarismo revolucionario. En este contexto surge el proyecto democratizador de ARENA, que nace del pueblo, es un esfuerzo que conlleva el establecer un régimen de libertades, para lograr progreso en un El Salvador en PAZ.
La Asamblea constituyente de 1982 bajo la presidencia de Roberto D´Aubuisson, del bloque parlamentario de ARENA, plasma en la Constitución: El Salvador que queremos, el país al que aspiramos. “Un El Salvador con oportunidades para todos, con equidad y libertad para progresar integralmente. Un país que viva en paz social permanente”. Esta es la visión de nación, que se concertó y busca inculcar una cultura de paz.

Por tanto, en la Constitución de 1982 se establecen los pilares fundamentales del proceso democrático; se crea el marco legal fundamental dentro del cual se pueda desarrollar la vida de la nación.
Es importante reconocer la valentía y patriotismo de los diputados y diputadas constituyentes porque en esa época se ponía en peligro la vida por la formulación pública de las posiciones políticas. Nuestro diputado Mártir, representante del Sector Obrero René Barrios Amaya, fue uno de nuestros muchos héroes caídos a manos de los comunistas de las FPL.
Los constituyentes admitieron la necesidad de introducir en la nueva constitución, principios y valores que deslegitimaran a la violencia como medio para dirimir diferencias ideológicas y para acceder al poder político. Estos principios fortalecieron el sistema democrático, republicano y representativo, viabilizando la construcción de la paz en El Salvador.

En la Constitución de la República de 1982 hay:
1. Reconocimiento de la persona humana como principio y fin de la actividad del Estado.
2. Establecimiento de un orden económico basado en los principios de iniciativa privada y libre participación ciudadana. Modelo de economía de libre mercado, un capitalismo humano.
3. Fortalecimiento del concepto de propiedad privada.
4. Establecimiento de un sistema político pluralista no excluyente. En donde se prohíbe la existencia de un solo partido político oficial y la de gobiernos totalitarios. Libertad de expresión plena.
5. Flexibilidad en el proceso de reforma de la Constitución, para que no hubiera necesidad de romper el orden institucional a través de la violencia (golpes de Estado) (Acuerdos de Paz).
6. Afirmación de las libertades políticas. Libertad de Expresión, Libertad de Asociación

En 1984 vamos a elecciones presidenciales que son ganadas por el PDC, llega al ejecutivo Napoleón Duarte que en pleno conflicto armado: profundiza la reforma agraria, establece un modelo económico proteccionista e intervencionista que entre otras medidas: fija precios de más 200 productos de consumo popular, mantiene la nacionalización de la banca, del comercio exterior. Ante la “guerra popular prolongada” declarada por el FLMN al pueblo salvadoreño, el gobierno Demócrata Cristiano responde con un proyecto político contra-revolucionario “comunitarista” que pretendía quitarle banderas políticas al FMLN. Todo está concepción errada de un proyecto político económico-social más que resolver los problemas, los empeoró.
Durante el período que va desde 1981 hasta 1889, ARENA fue la principal fuerza de oposición, comportándose durante ese período de manera propositiva, deliberante, apoyando todas las iniciativas del ejecutivo que beneficiaban a la población salvadoreña y oponiéndose a las que lo perjudicaban.